Subrazas Elficas

Avariel

Propiedades:

Ability bonus: dexterity +2
Ability bonus: intelligence +2
Ability bonus: wisdom +2
Skill bonus: spot +2

Autorizacion DM: SI

Descipcion General:
Los avariel, o elfos alados, son sin lugar a dudas la más solitaria y menos numerosa de las subrazas élficas de Faerûn. Hace tiempo que muchos eruditos los han considerado criaturas de leyenda, pero el hecho es que pequeños grupos de avariel todavía habitan en Faerûn, ocultos en enclaves escondidos y regiones remotas.

Descripcion Fisica:
El rasgo más sorprendente de los avariel son sus suaves alas cubiertas de plumas. Las alas miden desde los tres y medio a los cuatro metros de longitud y habi­tualmente son blancas, aunque también pueden ser grises, marrones, negras o moteadas. Los avariel están muy orgullosos de sus alas y pasan mucho tiempo acicalándolas. Su piel es pálida, a menudo se asemeja a la porcelana, con matices azulados o plateados. Tienen el pelo de un color blanco plateado o negro, y aunque pueden darse otras tonalidades, apenas sucede. Los ojos de los avariel son bastante más grandes y expre­sivos que los de otros elfos, y suelen tener brillantes reflejos de color azul y verde. Unos pocos avariel tienen los ojos de un brillante color violeta, tan puro como las amatistas. Los avariel tienen una estatura media de metro ochenta, con miembros delgados, gráciles y rasgos faciales angulo­sos. Son la más bella y llamativa de las razas élficas, aunque a menudo esta belleza es echada a perder por su altivez y condescendencia hacia sus parientes sujetos al suelo, de los cuales se burlan a menudo.
Los avariel son incluso más delicados que los demás elfos, y sus movimientos son rápidos, calculados y gráciles. Prefieren llevar una vestimenta ligera, ropas holgadas que capturen el movimiento y las ondas del aire cuando vuelan. Casi nunca llevan armadura porque pesa demasiado para el vuelo y obstaculiza sus gráciles movimientos, Los avariel no pueden volar si llevan armadura pesada.

Historia:
Junto con los elfos verdes y los lizhary, los avariel son una de las tres razas élficas más antiguas. Sin embargo, hoy se encuentran casi extinguidos, obligados a vivir en los rincones más alejados del mundo hace muchas edades por los dragones antiguos y cazados sin piedad por los pueblos malignos.
Los avariel, al migrar por vez primera a Faerûn hace milenios, encontraron que el mundo era un lugar vasto y maravilloso. Desafortunadamente, los despiadados dragones gobernaban los cielos de la antigua Faerûn. Los recién llegados avariel fueron casi aniquilados por los dragones antes del primer Florecimiento. Los últimos de su raza huyeron hacia oriente mucho antes de la primera Guerra de la corona, viajando por los cielos sólo cuando tenían que hacerlo, escondiéndose en el suelo como alimañas y viviendo terribles y sucias vidas entre la basura como nómadas.
El último reducto actual de los avariel es conocido como la Aguilera de las águilas nevadas, una ciudadela de cristal escondida en una de las cimas más remotas de las montañas del Margen helado en la lejana Sossal. La localización exacta de la Aguilera de las águilas, nevadas es uno de los secretos avariel más celosamente guardados.
La Aguilera se asemeja a un enorme castillo o torre de cristal construido en la cima cortada de una montaña. Un grupo de nómadas avariel la descubrió abandonada hace mucho tiempo. Los avariel creen que la cima original de la montaña se la llevó un archimago nezherino que deseaba utilizarla para construir una ciudad flotante. La aguilera de hoy día es una maravilla digna de contemplar. Los muros de cristal están endurecidos mágicamente hasta tener la resistencia del acero. En el inte­rior, la Aguilera de las águilas nevadas posee un clima tropical, con junglas llenas de plantas y árboles extintos hace largo tiempo en Faerûn.
Durante dos siglos, este último refugio de los avariel ha sido dirigido por el Padre alado Aquilan Granala. Los avariel vuelan tranquilos aquí, pescando en las aguas heladas del gran mar de Hielo y cazando en las cuencas heladas del Gran glaciar.

Perspectiva:
Los avariel estuvieron peligrosamente cerca de la extinción hace tiempo, y les ha costado miles de años recobrarse hasta poder dejar de temer por el futuro de su raza. Sólo recientemente han comenzado a expandirse de nuevo por el mundo, enviando exploradores, diplomáticos y mercaderes hacia el sur, hacia Faerûn. Pequeñas y desperdigadas bandas de avariel existen todavía en las tierras centrales de Faerûn, pero tales grupos rara vez sobrepasan la docena de individuos y evitan normalmente áreas civilizadas.
Los avariel son espíritus libres a los que nada les gusta más que ele­varse simplemente con las corrientes muy por encima del suelo, disfrutando de las vistas que ofrece Faerûn. Poseen unas irreprimibles ganas de vivir. Incluso en la más oscura y desesperada situación, un avariel permanece alegre. Desdichadamente, aunque son amistosos con aquellos a los que consideran sus iguales, los avariel tienden a ser condescendientes y realmente groseros con las razas terrestres. Los avariel generalmente no se percatan de esto; es una reacción natural tratar a las criaturas terrestres como seres inferiores. Con tiempo y el suficiente contacto con otras culturas, los avariel pueden superar su predisposición natural.

La sociedad avariel:
Los avariel tienen un modelo único para sus sociedades, separándose en dos grupos cuando se congregan en grandes números; una sociedad guerrera de soldados y guerreros, y una sociedad pacífica de pensadores y eruditos escolares. Estas dos subculturas tan diametralmente opuestas como lo son sus filosofías, trabajan juntas para forjar una poderosa relación simbiótica.
Los avariel guerreros tienen un complejo código de honor que utilizan para guiar y templar sus actividades militares y entrenamiento. Estos avariel pasan sus vidas defendiendo a sus parientes. Sus vidas están dirigidas hacia la guerra y el poder, y responden ante sus jefes de guerra, quienes comparten la responsabilidad de gobernar la sociedad con los líderes religiosos de los avariel pacíficos. Los avariel marciales son orgullosos y fogosos, y comparten una eterna amistad con aquellos que se ganan su respeto y confianza. En combate, los avariel guerreros no tienen compasión o remordimientos para acabar con sus enemigos.
El concepto de rendición es altamente deshonroso para estos avariel, tanto para ellos como para sus enemigos. Una vez comenzado el combate mortal, pocos avariel se retiran hasta que ellos o sus enemigos han muerto. Hacer sangrar a un enemigo no es sino la promesa de honrar al enemigo con las habilidades de combate que uno posee y no humillarle dejándole vivo para enfrentarse a la vergonzosa derrota. El acto de matar a un enemigo es visto simplemente como el cumplimiento de esa promesa.
Los avariel guerreros prefieren utilizar armas de alcance, y uti­lizarán sus alas para obtener ventaja sobre los enemigos en tierra. Esto está apoyado por su código, que les permite acabar con un enemigo desde una distancia inalcanzable en el cielo. Aquellos que no puedan defenderse de un ataque desde el aire, deberían haberlo pensado antes de enemistarse con un enemigo claramente superior.
Los avariel pacíficos, al contrario que sus parientes guerreros, se concentran principalmente en las artes y en los aspectos intelec­tuales de la vida. Cuando se enfrentan a un conflicto, los avariel pacíficos confían en sus cerebros y habilidades diplomáticas, y a menudo también en su poder mágico. Estos avariel pacíficos son artistas, filósofos e investigadores que pasan sus vidas estudiando el mundo y su historia y creando obras de arte por el simple placer de la creación. También son los responsables de proporcionar a la sociedad comida, educación y entretenimiento. Muchos avariel pacíficos son muy religiosos y pasan mucho tiempo contemplando los caminos de su deidad, Erdrie Fenya.
A pesar de sus personalidades divergentes, estas dos subculturas interaccionan sorprendentemente bien. Los jóvenes avariel habi­tualmente pasan su tiempo en ambas subculturas, aprendiendo de los guerreros y de los sacerdotes. Estos intercambios, que a menudo duran una década o más, permiten a los avariel que crecen en una subcultura saber cómo vive la otra.

Lenguaje y Literatura:
Todos los avariel hablan élfico y común, y cada uno aprende un idioma adicional basado en su región natal. La mayoría de los elfos alados son lo suficientemente inteligentes como para escoger al menos un idioma adicional. Este idioma adicional suele ser aurano, por lo que los avariel pueden hablar con las criaturas aliadas del aire, como las águilas gigantes a las que adoran. Los idiomas adicionales a menudo aprendidos por los avariel incluyen el trasgo, el orco, eI silvano y el idioma humano predominante en su región natal. Los avariel a menudo aprenden las lenguas dracónica y gigante para poder conversar con sus odiados enemigos si la nece­sidad lo requiere. Todos los avariel saben leer y escribir, excepto los avariel bárbaros (suponiendo que existan).

Magia y conocimientos de los avariel:
Aunque la subcultura guerrera de la sociedad avariel aprecia la magia y respeta su poder, los miembros de la subcultura pacífica son los verdaderos maestros de la magia arcana y divina. Al contrario que otras razas, los avariel han comenzado recientemente (en términos élficos) a volverse a establecer en Faerûn. Durante casi toda su histo­ria, los avariel nunca han tenido el lujo de experimentar y jugar con la magia, ya que estaban demasiado ocupados en sobrevivir. Pero con el descubrimiento y la colonización de la Aguilera de las águilas nevadas, durante los últimos 500 años, se empiezan a sentir lo suficientemente seguros como para comenzar de nuevo a investigar la magia.

Deidades de los avariel:
Al igual que los elfos acuáticos, los avariel reconocen al Panteón élfico en su conjunto y rinden culto a la mayoría de esas deidades élficas, pero tiene una predilección especial por un único miembro del panteón, en su caso Erdrie Fenya, la diosa elfa de los cielos, el clima y todas las aves. Aunque no elevan sus creencias religiosas al nivel del fanatismo, todos los avariel son profundamente religiosos, y el pensamiento de no venerar a una deidad es extraño e incomprensible para la mayoría de ellos.
Los avariel creen que han podido sobrevivir debido a la intervención de Erdrie Fenya. Hace mucho tiempo, Erdrie bendijo a los avariel con sus alas porque sabía que correrían grandes peligros y dificultades en el futuro y necesitarían la ventaja del vuelo si querían sobrevivir. Los avariel también piensan que interviene más directamente en sus vidas que las otras deidades de los elfos. Los avariel a menudo atribuyen a la intervención de Erdrie sucesos que la mayoría de las otras razas consideran simples coincidencias.

Relaciones con otras razas:
Los avariel se llevan bien con otras razas aéreas inteligentes de alineamiento bueno. Admiran y respetan a las águilas gigantes, un lazo que ha sobrevivido durante los oscuros siglos de persecución dracónica. Los avariel también se veían con los aarakocra, pero desde que los elfos alados fueron expulsados de los montes de la Estrella, la interacción con los hombres pájaro ha disminuido en gran medida. También se llevan bien con los genasíes de aire, aunque a menudo les frustra la ambivalencia de estos genasíes sobre el bien y el mal.
Las relaciones de los avariel con las razas terrestres no son tan productivas. Los avariel han visto tradicionalmente a aquellos que no pueden volar corno objetos de compasión (como mucho) o burla (frecuentemente). Ultimamente han comenzado a darse cuenta de su error; las razas terrestres, a pesar de su carencia de alas, pueden ser aliados útiles y poderosos. Los avariel de la Aguilera de las águilas nevadas han enviado recientemente embajadores a los reinos vecinos (Narfell, Rashemen, Damara y el gran Valle en particular) y han estado haciendo todo lo posible para tratar a las razas del suelo como iguales.
Los avariel siguen hoy en día siendo cazados por los dragones malignos, que ven a los elfos alados y a sus aptitudes para la magia como la mayor amenaza para su dominio de los cielos de Faerûn. Los dragones no tienen una presencia en los cielos como la tenían antaño, pero su memoria es muy grande. Particularmente, los dragones blancos de Hoarfern están dedicados a la destrucción final de los avariel y la Aguilera de las águilas nevadas.

Elfos Acuaticos:

Propiedades:

Sub-race syntax: Elf-Aquatic
Favored class: fighter

Decreased ability score: intelligence -2
Immunity: specific spell drown

Autorizacion DM: NO

Descripcion General:
Rara vez vistos por las razas terrestres, los elfos acuáticos son gente civilizada y de buen corazón que habita los mares que rodean a Faerûn. La mayoría provienen de las ciudades submarinas que se encuentran en el mar de las Estrellas fugaces o en el Gran mar al sur de Faerûn, pero se pueden encontrar también pequeños asenta­mientos de esta raza en las costas occidentales de Faerûn.
Los elfos acuáticos del mar de las Estrella fugaces han creado distintos reinos de varios tamaños. Las colonias más grandes incluyen Naramyr y Selu'Maraar en el Dralagón y en el estrecho de Vilhon respectivamente. También hay varios puestos fronterizos al este de la embocadura del estrecho de Vilhon y al oeste de Alamber, conocido como el muro de la Perdición de los tiburones. Otra colonia llamada Faenasuor yace en las faldas continentales al este de Mantostela, y se pueden encontrar un número de pequeños pueblos entre lo arrecifes del Colmillo al oeste de Aglarond. En el mar Impenetrable, cerca de Eterniôn, hay una gran ciudad de los elfos acuático llamada Iumazhiashae ("la Madre de los océanos)'. También se pueden encontrar colonias en las costas de Tezhyr.
Los elfos acuáticos han luchado muchas veces contra la razas malignas del mar, especialmente los sahuagin, pero los habitantes de la superficie apenas tienen conocimiento de ello.

Descripcion Fisica:
Los elfos acuáticos son altos, con una estatura de un metro ochenta o más. Tienen extremidades largas con fuertes músculos natatorios, y los dedos de manos y pies son largos y provistos de una gruesa membrana. Su rasgo más destacable es un conjunto de agallas a lo largo de la clavícula y el tórax. Los elfos acuáticos no son tan delgados como sus parientes terrestres, y su pelo suele ser grueso y fibroso, corto para los guerreros pero largo para el resto. Los elfos acuáti­cos del Gran mar tienen una piel radiante de un color verde oscuro con franjas y machas parduscas. Los elfos acuáticos del mar de las Estrella fugaces tienen la piel de muchas tonalidades azuladas, con manchas y estrías blancas. El color de los ojos de ambos tipos de elfo acuáticos se da en cada tonalidad que poseen los elfos lunares, solares y salvajes. Sus ropas están confeccionadas con plantas marinas en tonos de verde, negro y marrón, aunque apenas van vestidos, si es que llevan algo puesto, bajo el agua.

Historia:
Los elfos acuáticos aparecieron por primera vez en el Gran mar hace incontables edades, la última de las grandes razas élficas que migraron desde la tierra natal de los elfos. Durante mucho tiempo llevaron una vida nómada y pasaron la mayor parte de su tiempo explorando las aguas de su nuevo mundo. Los elfos acuáticos no empezaron a establecer comunidades permanentes hasta la época de la primera Guerra de la corona. Supieron de las Guerras de la corona, y a menudo contemplaron las batallas desde la seguridad de las aguas, pero mantuvieron al mínimo los contactos con sus parientes terrestres. Desafortunadamente, sus intentos de no verse involucrados en las guerras fueron inútiles, y en la época de la cuarta Guerra de la corona, muchos elfos acuáticos huyeron al mar de las Estrellas fugaces para establecer una nueva nación protegida de la locura de sus parientes.

Perspectiva:
Los elfos acuáticos son vistos por los habitantes de la superficie como criaturas caprichosas y desconfiadas, temerosas de abandonar el agua. Aunque no es del todo cierto, un elfo acuático sólo confía en sus vecinos cercanos y en su familia, incluso aunque comparta muchos lazos fuertes con cualquier conocido elfo de la superficie.
Los elfos acuáticos creen que unión y comunidad significa supervi­vencia, mientras que las facciones y la arrogancia significan la muerte. Mantienen las distancias incluso con otras razas acuáticas, excepto cuando les beneficia tener aliados o socios comerciales. A pesar de su actitud, los elfos acuáticos del mar de las Estrellas fugaces han comen­zado recientemente a superar sus tendencias naturales y a comerciar abiertamente con sus vecinos, tanto acuáticos como terrestres.

La Sociedad de los elfos acuáticos:
Los elfos acuáticos forman sociedades feudales débiles. La nobleza gobierna de una manera razonablemente progresista, y todas las convenciones sociales siguen una estructura patriarcal para los asuntos de herencia y transferencia de poder. Aunque las mujeres ostentan una considerable influencia, especialmente como bardos y hechiceras, la mayor parte del poder político reside en los varones ancianos.
Los elfos acuáticos forman estrechas comunidades cerradas. Aunque cada individuo o familia a menudo tiene un hogar al que llamar propio, es rara la existencia de la propiedad privada. Las herramientas, las armas y cualquier tipo de objeto cambian de manos muy a menudo. Si un elfo acuático necesita un objeto en particular, simplemente coge uno que encuentre, sin temor a repercusión alguna. El robo es relativamente desconocido entre los elfos acuáticos; no se puede robar algo que los demás consideran propiedad común. Esta actitud no se extiende a los visitantes extranjeros que no sean elfos acuáticos, y frecuentemente esos visitantes son vigilados para asegurarse de que tienen las manos quietas.

Lenguaje y Literatura:
Todos los elfos acuáticos hablan élfico, y escriben con un estilo distintivo de caracteres esprúar que muestran una clara influencia acuana. Los elfos acuáticos nativos del mar de las Estrella fugaces también hablan serusan, la lengua comercial del mar Interior, mientras que los elfos acuáticos del Gran mar y del mar Impenetrable hablan acuano. Ambos lenguajes utilizan el alfabeto acuano. Aquellos elfos acuáticos que tienen ese deseo también aprenden varios idiomas de la superficie, sobre todo común, khondazhano y silvano. Todos los personajes elfos acuáticos saben leer y escribir, excepto los bárbaros, combatientes y plebeyos.

Conocimientos y Magia de los elfos acuáticos:
De las siete subrazas élficas, los elfos acuáticos son los que menos se han interesado por la magia. Esto no quiere decir que no haya lanzadores de conjuros entre esta subraza, sino que la proporción de lanzadores de conjuros es más parecida a la que se encuentra entre los enanos que entre los humanos o elfos. Ni que decir tiene que el largo promedio de vida de un elfo acuá­tico le permite dedicar más tiempo a perfeccionar su entrenamiento mágico que a un humano similar.

Deidades de los elfos acuáticos:
Aunque los elfos acuáticos conocen el Panteón élfico, su verdadera deidad es Sashelas de las Profundidades. Casi todos los elfos acuáticos veneran de alguna forma al señor del Inframar. Los templos dedicados a Sashelas de las Profundidades se pueden encontrar en casi todas las ciudades de los elfos acuáticos. Estos edificios son construidos normalmente en piedra y tallados para que parezcan conchas Gargantuescas; sirven como centros espirituales, sociales y físicos para muchas comunidades de elfos acuáticos. Algunos elfos acuáticos religiosos vagan por los mares, fluyendo con las corrientes marinas, exultantes de la belleza natural de los fondos marinos y predicando la palabra de su señor a todo el que encuentran.

Relaciones con otras razas:
Los elfos acuáticos son gente cauta. Aun que hay muchas razas amis­tosa con los elfos acuáticos, como los tritones y los sirénidos, también hay muchas amenazas en las profundidades. Como resultado, los elfos acuáticos permanecen en sus ciudades e interactúan con los demás sólo cuando se ven obligados a hacerlo. Esta precaución se extiende a las comunidades de la superficie, pero a menudo es atenuada por la curiosidad. Los elfos acuáticos que viven cerca de la orilla a menudo pasan muchas horas espiando a sus vecinos respiradores de aire. Apenas hacen distinciones entre las distintas subrazas de elfos que habitan en tierra.
Una raza en particular debería ser mencionada en el contexto de los elfos acuáticos: los sahuagin. Los elfos acuáticos poseen un fiero y cegador odio hacia los demonios marinos y a menudo llevan a cabo guerras sin sentido contra ellos. Una manera segura de que un elfo acuático venza su timidez y recelo es ofrecerle una oportunidad de atacar y matar a alguno de los odiados enemigos de su raza.

Elfos del Bosque

Propiedades:
Sub-race syntax: Elf-Wood
Favored class: ranger

Ability bonus: strength +2
Decreased ability score: charisma -2
Decreased ability score: intelligence -2

Descripcion General:
Los elfos del bosque son la más numerosa de las razas élficas de Faerûn, un pueblo joven y confiado que mantiene con fuerza los antiguos bosques natales élficos. Herederos de la segunda generación de naciones élficas, los elfos del bosque ven sus reinos como los herederos naturales de tierras Como Ierlann y Cormanzhor. Donde los antiguos imperios se expandían con fuerza y orgullo, los reinos de elfos del bosque tienen la esperanza de crecer con humildad y compasión. Los elfos del bosque no ven sus tierras como una región apartada de Faerûn; comprenden mejor que sus semejantes que, para bien o para mal, sus destinos están unidos al destino de los humanos, enanos y medianos que les rodean.

Descripcion Fisica:
También conocidos como elfos cobrizos o elfos silvanos, estos elfos tienen una piel cobriza con tonalidades verdes, y con ojos castaños, verdes o avellana. El pelo es normalmente castaño o negro, ocasionalmente rubio o rojo cobrizo. Los elfos del bosque prefieren vestir con ropas sencillas, similares a las de los elfos lunares pero no tan coloridas. Prefieren el corte sencillo de una túnica o vestido, resaltado por bordados de motivos naturales.
Les gustan de una manera particular las armaduras de cuero, y a menudo llevan armaduras de este tipo exquisitamente trabajadas y primorosamente construidas, incluso cuando no están en peligro. Su ropa, tanto las armaduras de cuero como el resto, son de tonos oscuros del verde y color tierra para confundirse mejor con su entorno natural.
Son una raza modesta y rara vez realzan su apariencia con joyería o accesorios similares.

Historia:
Los elfos del bosque son la adición más reciente a las distintas subrazas de elfos de Faerûn, aunque la historia de su civilización aún sobrepasa a la de la mayoría de razas de Toril. También tienen la extraña distinción (que los elfos cobrizos consideran más bien un honor) de ser la única subraza élfica nativa de Faerûn. Los primeros elfos cobrizos no surgieron de repente; su raza fue fusionándose poco a poco durante el curso de varios siglos después de la última Guerra de la corona, uniendo a varios de los antiguos parientes élficos.
Las Guerras de la corona acabaron con la mayoría de las grandes naciones del Primer florecimiento. En el tiempo posterior a esas terribles guerras, miles de elfos quedaron afligidos y sin hogar. Las familias fueron rotas, y durante muchos siglos (conocidos como los Años errantes) esos elfos vivieron como nómadas. Algunos de los elfos de Faerûn se retiraron a sus hogares ancestrales y comenzaron a construir una segunda generación de naciones élficas, nueva pero a pequeña escala. Sin embargo, una parte significativa de elfos nunca sintió la necesidad de hacer eso. Esos elfos (la mayoría elfos lunares, solares y elfos verdes) juraron que no permitirían que las luchas internas separaran a su gente, retirándose a los bosques más profundos para buscar refugio de la locura del mundo.
Al contrario que los elfos verdes, estos autoexiliados no han caído en la barbarie. En lugar de ello, han formado sociedades estrechamente unidas que se mantienen en contacto con otras comunidades élficas afines escondidas en otros bosques. Con el tiempo, estos elfos recluidos se fueron sintonizando cada vez más con el mundo natural, y alejándose de la alta magia y el antiguo conocimiento que los elfos habían traído de su primer hogar, y se convirtieron en una nueva subraza de los elfos distinta de sus parientes: los elfos del bosque.
Mientras que los elfos lunares y solares fundaron reinos como Eterniôn y Eternôska tras las Guerras de la corona, el gran reino de los elfos del bosque fue la antigua Ierlann, un reino fundado en el Gran bosque oriental alrededor del -4.700 CV. Los elfos de Ier­lann mantuvieron contactos comerciales y diplomáticos pacíficos con otros imperios recientes en el Norte, consiguiendo la amistad del reino enano de Delzoun muy pronto tras su establecimiento en -3.900 CV, tutelando a los primeros nezherinos en la magia alrededor del -3.830 CV.
El imperio humano de Nezheril eclipsó pronto a sus vecinos elfos, creciendo en poder mágico y marcial a un ritmo alarmante. En -3.533 CV los nezherinos descubrieron los pergaminos de Nezher en las ruinas de Aryvandeir, explotando con avidez magia tan poderosa y terrible que incluso los elfos solares del primer Florecimiento no se atrevían a emplear. Durante siglos, los elfos del bosque de Ierlann trataron de controlar en secreto el orgullo y expansionismo de Nezheril, pero en el - 339 CV los nezherinos se autodestruyeron cuando Karsus buscó la divinidad y trajo en su lugar la destrucción catclísmica que acabo con su pueblo. Los elfos de Ierlann rescataron a muchos supervivientes nezherinos y les permitieron establecerse en la ciudad de Ascalcorno.
Los elfos y los humanos del norte vivieron en paz durante un tiempo, pero Ascalcorno fue condenada también por la locura de los magos. La invocación sin tomar precauciones de poderosos seres infernales condujo a un súbito y terrible asalto por parte de un ejército de diablos que tomaron la orgullosa ciudad en el. 882 CV. Esta vez, Ierlann no sobrevivió a la destrucción de sus vecinos humanos. Debilitada gravemente tras un año de contienda contra feroces hordas de orcos, Ierlann cayó pronto tras convertirse Ascalcorno en el castillo Puerta del infierno.
En los años que han seguido a la caída de Ierlann, los elfos del bosque no han erigido ningún otro reino, eligiendo poner su confianza en el sigilo y la vigilancia en lugar de castillos y ciudades. Aunque sintieron la llamada de la Retirada de los elfos, no respondieron. Con el fin de la Retirada, los elfos del bosque han emergido de sus hogares ocultos en las profundidades de los bosques de Faerûn como gentes fuertes y confiadas, cuya cautela es suavizada por su compasión. Los elfos cobrizos del bosque Alto sueñan con reestablecer la antigua Ierlann, pero esta vez su reino será un reino de aldeas retiradas y forestales vigilantes, no una ciudad amurallada de orgullosos guerreros.

Perspectiva:
Los elfos del bosque son tranquilos, serenos y difíciles de sorprender. Su paciencia es legendaria. Son uno con la naturaleza, y no se encuentran cómodos en las áreas muy civilizadas. Han perdido el deseo de construir y reemplazar la naturaleza con muros y palacios; incluso las ciudades construidas por sus parientes elfos les parecen una locura. Han llegado a creer que los edificios de piedra son por naturaleza temporales, y con el tiempo, el bosque regresa para cubrir la mayor de las ciudades. Otras razas interpretan esta actitud como fatalista o condescendiente, y como resultado, los elfos del bosque encuentran difícil comprender a cualquiera que no sea un elfo del bosque.

La sociedad de los elfos del bosque:
Los elfos del bosque viven de manera sencilla con la naturaleza, utilizando lo que ocurre de manera natural en el mundo para protegerse y defenderse. No son nómadas ni reclaman grandes territorios en las tierras boscosas más profundas de Faerûn. Algunos elfos del bosque eligen vivir sin casas, muebles, ni cualquier otra posesión que no puedan llevar consigo, utilizando las ramas altas de los grandes árboles o las cavernas naturales en sus raíces como protección y lugar de almacenaje. La mayoría de los elfos del bosque en cambio, prefieren vivir en pequeños pueblos y hogares permanentes de piedra natural y madera primorosamente tallada, tan cuidadosamente camuflados con su entorno que un cazador humano podría caminar por el centro de un poblado de los elfos del bosque y no enterarse de que lo ha hecho.
Los elfos del bosque se adhieren a una tradición en la que el liderato es desempeñado por los druidas más ancianos y más experimentados, aunque la mayoría de los poblados forman un consejo de ancianos seleccionado de entre los más sabios y experimentados ancianos de cada familia para los asuntos diarios. La jerarquía druídica sirve para unir a los elfos de diferentes poblados y juntar a todos los elfos de un bosque en particular en un reino común. Los druidas no dicen a los ancianos cómo gobernar su poblado, pero los ancianos generalmente toman en gran consideración cualquier cosa que diga un druida.
Los elfos del bosque sobresalen en la caza. Pasan mucho tiempo acechando en sus territorios en busca de alimento o intrusos en su reino. En resto del tiempo lo pasan saltando entre las ramas; en este aspecto son muy parecidos a los elfos lunares y salvajes. Con el fin de la Retirada, los elfos del bosque han vuelto rápidamente a entrar en contacto con el mundo civilizado. Aunque se muestran reacios a permitir la entrada de otros en sus tierras, los elfos del bosque comprenden que los tiempos están cambiando. Si desean sobrevivir como pueblo, puede que sea hora de que los elfos cobrizos cambien también.

Lenguaje y Literatura:
Todos los elfos del bosque hablan élfico, común y el idioma de su región natal, si existe. El elfo medio no tiene ni el interés ni la dedicación para aprender otros idiomas, pero los que lo hacen a menudo aprenden khondazhano, dracónico, gnomo, trasgo, gnoll y silvano. Todos los elfos del bosque saben leer y escribir excepto los bárbaros.

Deidades de los elfos del bosque:
Los elfos del bosque adoran al Panteón élfico, pero mantienen una adoración y respeto especial por los antiguos poderes de los bosques de Faerûn, Silvanus y Mielikki. Entre el Panteón élfico, los elfos del bosque tienen una devoción especial por Solonor Zhelandira, el Gran arquero, y por Rillifein Rallazhil, el Señor de la espesura. Solano, como deidad de la arquería y la caza, es considerado la deidad tutelar especial de los elfos del bosque, y antes de una batalla su nombre es invocado pro ellos a menudo.

Relaciones con otras razas:
En los 500 años transcurridos desde la caída de Ierlann, los elfos del bosque han sido olvidados por la mayoría de los habitantes de Faerûn. Solamente aquellos humanos y enanos nativos del norte y familiarizados con las fronteras del bosque Alto han visto elfos cobrizos, incluso entonces, sólo se han encontrado con un cazador o explorador solitario. Mientras los elfos del bosque se protegen en las profundidades de los imponentes bosques y son inaccesibles para sus vecinos, irónicamente son la más compasiva y comprensiva de la subrazas élficas. Al igual que los elfos lunares, aceptan el poder de la humanidad y buscan vivir junto con sus vecinos humanos y guiarlos en su expansión en lugar de buscar la manera de disuadirlos o intimidados.
Los elfos del bosque poseen una larga historia de cooperación con los enanos escudo, cuyo reino de Ammarindar se levantó al lado de su propio reino de Ierlann durante muchos siglos, en el valle del río Delimbiyr. Por extensión, también tienen una buena opinión del resto de los enanos. Los gnomos y los medianos son considerados tanto amigos como aliados potenciales. Por otro lado, en el corazón de los elfos del bosque hay un frío lugar reservado para los orcos y los gnolls, que traen hachas, fuego y destrucción a los bosques que los elfos han jurado proteger.

Actualizado.

Con esto ya estan las guias para todas las razas elficas que hay disponibles en el server.